Michael Waters
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Las tres tareas más difíciles del mundo no son hazañas físicas ni logros intelectuales, sino actos morales: devolver el amor por el odio, incluir a los excluidos y decir: "Me equivoqué".
¿Te has dado cuenta de lo obsesionados que estamos todos con hacer las cosas bien? No solo eso, sino hacer lo correcto más rápido y mejor que nunca. En todas partes, hay libros, revistas y blogs dedicados a asegurarnos de que tenemos los secretos del éxito para que no nos equivoquemos. Frente a todo este rampante perfeccionismo, es fácil pasar por alto la importancia de estar bien sin equivocarse de vez en cuando..
Tuve un mal día ayer. De hecho, me atrevería a decir que mi mañana fue un desastre y que no hay nadie a quien culpar sino a mí. Manejé un par de problemas ESPECTACULARMENTE mal. A las 10 de la mañana, había hecho un daño grave, aunque con suerte impermanente, a algunas relaciones importantes en mi vida, tanto personales como profesionales..
Por qué es importante equivocarse: el valioso arte de la disculpa